Por: Luis Eduardo Peña
Muchas veces cuando nos sucede alguna situación inesperada que nos deprime -una ruptura amorosa, pérdida del empleo, dificultades económicas, la muerte de un ser querido, u otra- nuestra reacción inmediata es alejarnos, desconectarnos, dejar de interactuar con nuestro entorno, y entramos en un periodo casi que de “hibernación”.
Cuando estamos deprimidos dejamos de salir y preferimos quedarnos en casa retirándonos de nuestras actividades habituales, enfrascándonos en pensamientos “rumiativos”, es decir, dando y dando vueltas en la mente sobre la situación que nos ha afectado, alejándonos de las personas y en general asumimos conductas de “evitación”.
Al hacer esto dejamos de inyectarle a nuestro estado de ánimo actividades que nos producen placer y logro, y por tanto nos sentimos cada vez más deprimidos; y entre más deprimidos, menos actividades de placer realizamos, nuestro estado de ánimo empeora y entramos en un círculo vicioso.
Hay un método psicológico con evidencia científica que busca precisamente romper con ese círculo vicioso y de esta manera tratar de manera efectiva la depresión: La Terapia de Activación Conductual, TAC.
Es natural que cuando estamos tristes dejemos de encontrar placer en actividades con las que antes disfrutábamos, dejemos de lado situaciones placenteras, nos queramos “desconectar” de la realidad y retraernos socialmente.
Pero cuando una persona afronta las situaciones deprimentes con estas conductas de evitación y aislamiento, en lugar de aliviar su depresión, muy al contrario la empeora.
La Terapia de Activación Conductual para tratar la depresión busca neutralizar estas conductas de escape o evitación alentándonos a realizar actividades y tareas significativas que generen placer o logro, que permitan poco a poco aumentar nuestras opciones de reforzamiento positivo y así mejorar nuestro estado de ánimo.
Entre las actividades que la TAC puede promover están la recuperación de tareas abandonadas, el replanteamiento de nuestros propósitos de vida, la eliminación de conductas de aislamiento del entorno y evitación, la programación horaria y la recuperación de obligaciones domésticas, laborales y sociales.
El propósito es ayudarnos a comenzar o a tomar medidas para volver a participar y ser protagonistas de nuestra propia vida, a pesar de los sentimientos y pensamientos negativos o de la falta de motivación.
La idea es que a través de la realización de actividades de placer y de logro, la persona retome la interacción que tenía con su entorno antes de deprimirse.
Si usted atraviesa por esta situación, a continuación le recomiendo algunos sencillos tips del método de la Activación Conductual, los cuales puede aplicar para ayudarse a salir de la depresión:
Si a pesar de seguir estos tips su estado de ánimo no mejora, la recomendación es acudir a un profesional de la Psicología o de la Psiquiatría. La depresión es un problema de salud mental que puede ser tratado de manera efectiva y rápida, para que pueda mejorar su calidad de vida. Terapia de Activación Conductual para tratar la depresión
Luis Eduardo Peña
Psicólogo Clínico
Cel. (+57)3113088073